jueves, 27 de septiembre de 2012

La Cosmética Erótica



Aunque frecuentes desde hace tiempo en versiones menos sofisticadas en las tiendas sex-shop tradicionales, los cosméticos eróticos se están convirtiendo en un fenómeno que es bienvenido. Al fin y al cabo, comprar cosmética puede parecer algo más inocuo que entrar en un local comercial y preguntar por el último modelo de dildo o de "consolador"... es más elegante y discreto, sin duda, tiene una aplicación más sutil, resulta divertido, creativo y estimulante, femenino y ayuda a las mujeres a sentirse bien por dentro y por fuera.

La tendencia es clara. La mujer del siglo XXI toma las riendas de sus relaciones sexuales y demanda productos y servicios que antes eran terreno acotado del hombre. En este contexto surgen iniciativas como tiendas de lencería erótica femenina, tiendas gourmet en la que se puede encontrar todo lo relacionado con la gastronomía y el placer erótico (en este caso, con un concepto dirigido tanto a hombres como a mujeres), webs especializadas en la venta de artículos eróticos y sexuales con cada vez más amplios catálogos dirigidos a la mujer  o incluso exclusivos de mujeres, en definitiva establecimientos que se están convirtiendo en todo un referente en el sector sexual femenino.

Ya se empiezan a conocer las reuniones "Tuppersex", en las que una asesora acude al domicilio acordado cargada con todo un arsenal de objetos y productos eróticos (en una discreta maleta) para explicar, en un ambiente distendido y al uso que estilaban antes otro tipo de productos, a grupos de desenfadadas y desinhibidas mujeres para qué sirve cada artilugio de su sugerente maleta.

Ahora, entre los productos que estas asesoras pueden presentar se encuentran las líneas cosméticas que cuentan con productos tan sorprendentes como los polvos de miel, el chocolate extensible con pincel, la crema orgásmica o el gel de baño con sabor a menta y frutas exóticas.

Según un sondeo realizado por la empresa comercializadora de estos productos, la mayoría de las mujeres recibió con expectación la información sobre esta nueva cosmética, de la que valoran, sobre todo, que sea una herramienta de comunicación sin palabras con sus parejas. El 95 % de las visitantes del stand en la Feria adquirió al menos un producto, el 99% de las personas que rellenó la encuesta encontró genial la idea de los cosméticos eróticos y el 97,5% aseguró que se podía imaginar perfectamente utilizándolos.


La sensual textura de aceites afrodisíacos de chocolate, vainilla o cereza o las cremas de masaje de frambuesa, comestibles y elaborados con materias primas naturales, resultan ciertamente apetecibles para cualquiera. Como lo son también las cremas lubricantes, de masaje y aceites corporales con fragancias que aseguran la seducción y el deseo a través de feromonas. Cosméticos que no sólo embellecen, sino que se prueban, se huelen, se comen y revelan todo un mundo de sensaciones que unen la belleza con el arte de amar.


En toda esta cosmética prima el punto de vista femenino en el juego erótico y de seducción, el concepto de combinar cosmética, calidad, valores activos dermatológicos y una presentación atractiva, con diversión y placer, en respuesta a la demanda de la mujer actual que reclama la libertad y la igualdad en el terreno sexual.



Vademécum de la Cosmética Sexual
Estos son algunos de los ingredientes más comunes en la cosmética erótica, responsables de que sus promesas se cumplan:

Sexo duradero
Benzocaína: Utilizada en preservativos con efecto retardante, resulta eficaz para alargar el acto sexual, puesto que llevan una lubricación interior con benzocaína (alrededor de un 5%), que ayuda a mantener la erección. La benzocaína es un anestésico local que bloquea la conducción de los impulsos nerviosos.

Sexo vigorizante y resistente
Zanifil: Este gel vasodilatador es el ingrediente clave del nuevo preservativo CSD500, también llamado condón azul, por sus efectos similares a los de la Viagra. Al penetrar en el pene, incrementa su flujo sanguíneo local. En dosis farmacológicas es una sustancia inocua y no daña el látex del preservativo. Aunque se lo ha llamado condón viagra, no contiene ninguna dosis de este fármaco.

Lubricante
Propilenglicol: Es un compuesto orgánico de base acuosa, habitual en los lubricantes íntimos. No interfiere la acción de los anticonceptivos y no afecta al látex de los preservativos. Tampoco deja residuos en las paredes de la vagina, lo que evita irritaciones e infecciones.

Mayor sensibilidad y orgasmos más intensos
Ginseng: La base de muchos lubricantes. De todas sus propiedades, destaca la de estimulante vasomotor y del sistema nervioso. Mezclado con otros ingredientes naturales de origen vegetal, proporciona un efecto calor debido al aumento del flujo sanguíneo. El resultado: mayor sensibilidad y orgasmos más intensos y placenteros.

Contraste frío-calor y sensibilidad a flor de piel
Mentol: Responsable del efecto frío de algunos preservativos, cremas y lubricantes. Aumenta la sensibilidad e intensifica las sensaciones, y aporta propiedades analgésicas. En grandes cantidades, el mentol puede provocar sensación de quemadura o dolor.
L-arginina y L-carnitina: Son los aminoácidos impulsores del orgasmo femenino. Aplicados con un masaje sobre el clítoris y los labios menores, favorecen su vasodilatación y estimulan la circulación sanguínea en la zona. Provocan una agradable sensación de frío-calor.
Caprylic/capric triglyceride: Es un componente neutro y oleoso, de baja viscosidad, con propiedades de dilución para muchas sustancias liposolubles, empleadas en geles y cremas estimulantes. Causante del contraste frío-calor.
Capsicum: Componente químico que tiene propiedades afrodisíacas y estimula el receptor térmico en la piel, especialmente en las membranas mucosas.


¿Te atreves a usarlos?




FUENTES: